Un lugar en el cual podamos una ves mas dialogar

jueves, 17 de septiembre de 2009

Clariviesencia

Bajo los susuros del cesped
en donde el Ocobo rie y las bocas
se entrecruzan, se evaporan,
el silencio de tu mirada
penetra los ejercitos de mi ser

y mientras el reloj duerme
tu abrazas al fuego galopante y maternal
que exhala el temblor que sacue las formas
de un mismo molde